“OIT: Las habilidades, experiencia y agallas del venezolano, podría ayudar a levantar las economías de la región latinoamericana”
Marc Margolis, un columnista del portal económico Bloomberg, aconsejó que la situación venezolana podía ser vista con unos ojos más productivos. En tal sentido, consideró que el ímpetu venezolano podría servir de gran ayuda para levantar la economía de la región; la cual ha sido fuertemente golpeada por el coronavirus.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), aseveró que ante la crisis que está viviendo Venezuela desde hace 6 años aproximadamente; han emigrado 5,4 millones de nacionales. Según cifras de Acnur, la mayoría se encuentra residiendo en américa latina.
Sin embargo, pese a la solidaridad que han tenido diversos gobiernos con la diáspora, la xenofobia ha sido un factor con el que muchos venezolanos han tenido que lidiar. Acoso social, salarios sub pagados y hasta asesinatos pasionales son algunas de las consecuencias que ha tenido que padecer el venezolano en el exterior.
En consideración a lo anterior, Margolis considera que “Indiscutiblemente, el ataque de los refugiados se suma a la carga de los vecinos continentales de Venezuela; que ya deben atender a sus propias poblaciones vulnerables”.
Marc, siendo un especialista en asuntos latinoamericanos, apuntó al último informe de la OIT (Organización Internacional del Trabajo); que asegura que la pandemia destruyó 43 millones de trabajos en el contexto latinoamericano.Por lo tanto, asegura que es un buen momento para que los venezolanos brillen y puedan ayudar a impulsar las economías de la región.
En concordancia a un estudio reciente de la OIT, los países latinos que albergan presencia de venezolanos, podían aprovechar las “habilidades, experiencia y agallas” de estos, para levantar nuevamente a su país.
“Pensamos que los migrantes son vulnerables, pero producen, consumen y contribuyen a las sociedades y la economía (..) Si los protege y reconoce, eso es ventajoso para el estado anfitrión”, expresó Fracncesco Carella, especialista en migración de la OIT.